Un equipo de GHA regresó a Haiti a principios de Enero para seguir y desarrollar los proyectos. El fin principal era construir un habitáculo en Mirebalais al lado de la iglesia ya realizada. Este proyecto tiene varios objetivos:
- transmitir técnicas de construcción inéditas en Haití(cimientos parasísmicosy utilización de ladrillos fabricados en arcilla y paja).
- permitir al responsible de la comunidad que ha aumentado de 500 a 800 personas, estar presente permanentemente para velar pour la buena marcha de las diferentes actividades (alfabetización, cultura de cereales y verduras, orfanato).
El edificio realizado es espacioso y agradable. Un curso de alfabetización para alrededor de 35 niños, abrirá a principios de febrero.
El profesor ha sido contratado por la asociación. Este curso será gratuito para los alumnos. En Domont, en una iglesia a 10 km de allí, se abrirá otro curso de alfabetización para unos 35 niños más.
Se utilizan cuerdas para trazar los cimientos de la casa según el plano.
Los cimientos se realizarán siguiendo las normas más severas y las técnicas se transmitirán a los trabajadores haitianos.
Para facilitar el trabajo, se compró un mezclador de cemento manual.
Los largueros se hacen a mano y colocados según el constructor del equipo.
En la zanja.
Mientras que el trabajo continúa, se realizan visitas a los campos de refugiados de Puerto Príncipe.
La asociación ayuda a familias monoparentales (mujeres solas con niños) a buscar alojamiento fuera de los campos.
Familia de 10 personas que ha sido afectada por el cólera.
Un orfanato que lleva en el campo un año, ha sido financiado para que pueda volver a los locales que quedaron desiertos tras el terremoto y en el que el pillaje hizo desaparecer el mobiliario.
Se ha ayudado a otras famílias y también a niños muy pobres en la región de Mirebalais dónde los trabajos continúan.
La idea es contruir un habitáculo con una estructura de cemento parasísmico y levantar los muros en ladrillo de adobe (mezcla de tierra y paja). La finalidad es convencer a los constructores locales, ya que culturalmente no están muy abiertos a la idea, pues les parece estar dando un paso hacia atrás.
La paja de arroz es recolectada en un campo vecino
La arcilla se encontró gracias a la empresa de obras públicas que está realizando la carretera de Puerto Príncipe a Mirebalais. La tierra encontrada es extraordinaria, una de las más bellas vistas jamás por el constructor del equipo.
Con la tierra, el cemento no funciona correctamente y se tiene que utilizar cal, este material no está disponible por las vias normales y es a través de un campesino que la fabrica al borde de un rio que será posible conseguirla.
La fabricación de los ladrillos ha comenzado …
El molde ha sido mejorado y fabricado en metal.
El jefe de los albañiles desmolda el primer ladrillo.
Seguidamente vienen otros.
Además, se distribuyen pastillas purificadoras de agua al mayor número de personas. Los haitianos están bien informados en cuanto a cómo evitar la propagación del cólera, lo que ha permitido impedir la propagación de la’ epidemia. Se hace entrega de medicamentos específicos para el tratamiento del cólera a la enfermera de la misión.
El equipo se desplazó a Carice, un pueblo de Haiti donde se habian construido una casa de tierra. Los religiosos en el lugar, ayudan a desarrollarse a los agricultores locales. .
La asociación les ayudará con la escolarización de algunos niños de los agricultores.
La iglesia de Puerto Príncipe, que sufrió daños en el terremoto, ha sido restaurada, y la escuela de informática y de costura, reabrirán sus puertas. Además, también se abrirá un curso de alfabetización.